El Perú acaba de obtener la certificación “país conforme” de la Iniciativa para la Transparencia de las Industrias Extractivas (EITI, por sus siglas en inglés). Es el décimo segundo país que la recibe, de un total de 35 que implementan la iniciativa en cinco regiones del mundo. Es el primer Gobierno del continente americano que logra este reconocimiento.
EITI es un movimiento global, surgido en la Cumbre de la Tierra de Johannesburgo en 2002, y es promovido por una alianza entre Estados, empresas mineras, de petróleo y de gas y sociedad civil. Su finalidad es avanzar hacia la máxima transparencia en los flujos de pagos que realizan las empresas extractivas al Estado, los ingresos que este registra y su utilización. Es un medio para prevenir la corrupción y aportar información que mejore el debate público sobre la gestión sostenible de estas actividades.
La mencionada calificación se logró luego de la presentación del segundo estudio de conciliación de pagos e ingresos. La presión de la sociedad civil y la voluntad de concertación de los diversos sectores se reflejan en el hecho de que 51 empresas mineras y de hidrocarburos son parte de esta iniciativa. Estas representan alrededor del 85 % del valor de producción de ambos sectores: una alta cobertura si se considera el gran número de empresas mineras que existe en el país.
En el Grupo Propuesta Ciudadana consideramos que es un logro importante y que se ha obtenido mediante un trabajo conjunto y concertado entre el Estado, las empresas y la sociedad civil. Valoramos este resultado porque estamos convencidos de que la transparencia y la rendición de cuentas son mecanismos que contribuyen a la gobernabilidad y promueven la democratización. Estas forman parte de un enfoque integral que incluye otras dimensiones, como la gestión sostenible del medioambiente, los derechos de las comunidades campesinas y nativas, el ordenamiento territorial y la institucionalidad pública para su gestión. Todos estos son aspectos que tienen la mayor relevancia en la explotación de los recursos naturales no renovables.
Para mantener este estatus, el Perú tendrá que elaborar y difundir estudios anuales de conciliación, y deberá trabajarlos de manera concertada para mejorar la calidad y el alcance de los mismos. En esa perspectiva es importante, por ejemplo, ampliar el número de empresas que participan y que todas ellas acepten la publicación de la información, empresa por empresa. El principal pago que realizan las empresas extractivas es el impuesto a la renta y el 50 % de este representa el canon minero para los gobiernos regionales y locales. La difusión de la información detallada sobre dicho tributo tiene importancia pública.
Para profundizar esta iniciativa pensamos que es indispensable elaborar y difundir estos informes en cada región, siguiendo el mismo criterio de trabajo concertado. Así, los diversos sectores de la población podrán tener una visión más clara de la dimensión de estos recursos. Con ello estarán en mejores condiciones de evaluar los posibles beneficios que pueden esperar de los crecientes recursos transferidos hacia sus respectivos gobiernos regionales y municipalidades.
Es de resaltar que, luego de tomar la decisión que comentamos, el Consejo Internacional del EITI acordó realizar su próxima reunión en Lima, con la idea de discutir los logros y desafíos futuros de esta iniciativa, partiendo de las experiencias existentes en materia de la renta de las industrias extractivas en la región.